
Según informes, Estados Unidos ha suspendido sus operaciones cibernéticas ofensivas contra Rusia, en medio de los esfuerzos de la administración de Trump por otorgar concesiones a Moscú para poner fin a la guerra en Ucrania.
La orden reportada de detener las operaciones de hackeo lanzadas por Estados Unidos contra Rusia fue autorizada por el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, según The Record. La nueva guía afecta a las operaciones realizadas por el Comando Cibernético de EE. UU., una división del Departamento de Defensa centrada en el hackeo y operaciones en el ciberespacio, pero no se aplica a operaciones de espionaje realizadas por la Agencia de Seguridad Nacional.
La orden reportada ha sido confirmada por The New York Times y The Washington Post.
La orden se dio antes de la reunión en la Oficina Oval entre el presidente de EE. UU., Donald Trump, el vicepresidente JD Vance y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, según los informes. The New York Times dijo que la instrucción formaba parte de un esfuerzo más amplio para llevar al presidente ruso, Vladimir Putin, a conversaciones sobre la guerra en curso en Ucrania.
El Comando Cibernético de EE. UU. y el Pentágono no respondieron a las preguntas de TechCrunch, pero un funcionario de defensa senior le dijo a The Record que no "discutimos inteligencia cibernética, planes u operaciones".
The Guardian también informa que la administración de Trump ha señalado que ya no considera a los hackers rusos como una amenaza de ciberseguridad, y supuestamente ordenó a la agencia de ciberseguridad de EE. UU., CISA, que dejara de informar sobre las amenazas rusas. El periódico cita un memo reciente que establece nuevas prioridades para CISA, incluyendo amenazas enfrentadas por China y protección de sistemas locales, pero el memo no mencionaba a Rusia. Se informó verbalmente a los empleados de CISA que debían pausar cualquier trabajo sobre amenazas cibernéticas rusas.
El Departamento de Seguridad Nacional, que supervisa CISA, negó el informe en un comunicado a TechCrunch.
Tricia McLaughlin, secretaria asistente de Seguridad Nacional, dijo que el memo no provenía de la administración Trump, y que "CISA sigue comprometida en abordar todas las amenazas cibernéticas a la infraestructura crítica de EE. UU., incluidas las de Rusia".
"No ha habido cambios en nuestra postura o prioridad en este frente", dijo McLaughlin a TechCrunch.
El cambio reportado en la política de EE. UU. hacia Rusia por parte de la administración Trump llega meses después de que la comunidad de inteligencia de EE. UU. dijera que Rusia representa una "amenaza cibernética duradera" para Estados Unidos. En su evaluación anual de amenazas, EE. UU. advirtió que el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, o SVR, sigue apuntando a agencias gubernamentales de EE. UU. y a infraestructuras críticas como cables submarinos y sistemas de control industrial.
En los últimos años, el gobierno de EE. UU. también ha tomado medidas contra una serie de ciberdelincuentes rusos: ha logrado interrumpir la infraestructura de grupos de ransomware vinculados a Rusia, recuperado millones en pagos de rescate pagados a hackers rusos y ha apuntado a algunos de los hackers rusos más notorios con acusaciones y sanciones.